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Empezamos porque veíamos cómo muchos dueños de negocios en Asturias tenían dificultades con algo fundamental: entender sus propios números. No por falta de inteligencia, sino porque nadie les había explicado las finanzas de manera clara.
En 2019, una conversación en una cafetería de Oviedo cambió todo. Hablábamos con el dueño de una panadería que había estado operando durante quince años. Rentable, con clientes fieles. Pero cuando le preguntamos sobre sus márgenes, se quedó callado. No tenía ni idea.
Esa conversación se repitió una y otra vez. Empresarios talentosos que sabían hacer su trabajo a la perfección, pero que navegaban sus finanzas casi a ciegas. Miraban sus cuentas bancarias en lugar de sus estados financieros. Tomaban decisiones basándose en intuición cuando tenían datos que podrían haberles ayudado.
Así que decidimos hacer algo diferente. No queríamos ser otra consultoría que llegaba con términos complicados y hojas de cálculo incomprensibles. Queríamos traducir las finanzas al lenguaje de la gente real que dirige negocios reales.
Trabajamos con empresas que facturan entre 200.000€ y 3 millones anuales. Ese espacio donde ya no eres una microempresa, pero tampoco tienes un departamento financiero completo.
Somos dos personas con formaciones diferentes pero con la misma obsesión: hacer que las finanzas empresariales sean comprensibles y útiles.
Directora de Estrategia Financiera
Trabajé ocho años en banca corporativa antes de darme cuenta de que prefería estar del otro lado. Me cansé de ver cómo las entidades financieras hablaban a las empresas en un idioma que parecía diseñado para confundir. Ahora ayudo a empresarios a entender exactamente qué significan sus números y qué pueden hacer con esa información.
Consultora de Análisis Empresarial
Empecé haciendo análisis de datos para empresas tecnológicas. Lo que descubrí es que los mejores datos del mundo no sirven de nada si nadie los entiende. Me especialicé en convertir hojas de cálculo complejas en información que realmente puedas usar para tomar decisiones. También en identificar patrones que los números cuentan sobre tu negocio.
No hacemos diagnósticos express ni vendemos soluciones mágicas. Cada negocio tiene su propia lógica financiera, sus propios ciclos, sus propios desafíos. Dedicamos tiempo a entender tu empresa antes de hacer recomendaciones.
Nuestras sesiones son conversaciones, no presentaciones. Traemos los datos, pero tú conoces el contexto. Entre ambos, encontramos las respuestas que tienen sentido para tu situación específica. Y sí, usamos lenguaje normal. Explicamos los términos técnicos cuando aparecen.
Trabajamos principalmente con empresas en Asturias y Galicia, aunque también atendemos clientes de otras regiones de forma remota. Preferimos las relaciones a largo plazo donde podemos ver el impacto real de las mejoras financieras.
No tenemos un manifiesto corporativo impreso en la pared. Pero hay cosas que nos negamos a hacer y otras que defendemos incluso cuando es incómodo. Aquí están las principales.
Si no puedes explicárselo a tu equipo en una reunión de veinte minutos, probablemente estás complicando las cosas más de lo necesario. Las finanzas pueden ser simples cuando te enfocas en lo que importa.
A veces los números dicen cosas que no quieres escuchar. No suavizamos mensajes difíciles, pero tampoco dramatizamos. Te decimos lo que vemos y exploramos opciones contigo.
La solución perfecta que no implementas vale menos que la solución decente que sí pones en práctica. Preferimos mejoras graduales y sostenibles sobre transformaciones imposibles.
Vemos información sensible todo el tiempo. Nunca compartimos detalles de clientes, ni siquiera de forma anónima para ejemplos. Tu información financiera es tuya.
Ofrecemos una primera conversación sin compromiso para empresas que están considerando mejorar su gestión financiera. Es simplemente una charla para ver si tiene sentido trabajar juntos.
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